Mediante estudios realizados, podemos ver que hubo un aumento de fraudes con respecto al año 2020 cuando empezó todo el revuelo de la pandemia.
Estos fraudes estaban estrechamente relacionados con los seguros de hogar. El confinamiento domiciliario obligatorio hizo que las personas usáramos de manera más frecuente los elementos básicos del hogar como: electrodomésticos, sistemas de cristalería, gastos comunes del condominio y de allí nace el ascenso de los fraudes del ramo.
Las reclamaciones normalmente provienen de una avería real, que no fue provocada con intención, sin embargo se inflan los costos para poder cobrar un mayor seguro. Todo lo anterior se trata de clásicas averías de goteras, roturas de cañerías y otros tipos de fugas, representando 44% de los intentos de estafa en el ramo hogar.
Otras de las problemáticas inducidas fueron la simulación de averías eléctricas para por ejemplo la nevera, denunciar una subida de tensión en plena tormenta para reclamar una computadora nueva, reclamar por una inexistente fuga de agua en el piso para repararlo, entre otros.
Miguel Ángel Álvarez, responsable de la lucha contra el fraude de la Unespa (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras), señaló que el haber tenido que pasar dos meses en nuestras casas, aumenta la probabilidad de que haya intentos de fraudes a los seguros del ramo hogar.
También podemos destacar que los intentos de fraude para el 2020 fueron por fenómenos climatológicos, principalmente en los daños por tormentas, que pasaron de 18% a 28% de las falsas reclamaciones de los hogares.
Por otro lado, a pesar de que el ramo vehicular sigue siendo el que más estafas registra (por ser un servicio con el que cuenta de forma obligatoria toda persona que conduzca un auto), este ha experimentado un notable descenso en España, al pasar del 61% del año 2013 al 41% de 2020.
A pesar del confinamiento y de las limitaciones en la movilidad que marcaron el año pasado, los siniestros relacionados con el auto continúan siendo los más frecuentes. El porcentaje de fraudes al seguro a través del coche se situó el año pasado en un 47%.
Se conoce que 18% de las reclamaciones contienen un elemento de fraude.